En la meseta de la provincia de El Giza, en el límite de la ciudad con el desierto libio, se levantan tres de los monumentos pertenecientes a una de las siete maravillas del mundo antiguo: las pirámides de Keops, Kefrén y Micerinos.

Ganaron el mote de “pirámides de Egipto” a pesar de haber muchas más desperdigadas en el territorio.

De estas, la más conocida y admirada de todos los tiempos es la inmensa mole de piedras de la pirámide de Keops, símbolo eterno del Egipto antiguo y moderno.

 

Atracciones turísticas de Giza

 

¿Cómo llegar de El Cairo a las pirámides de Giza?

 

Viajar de El Cairo a las pirámides en taxi

Puedes coger un taxi amarillo o un taxi blanco y negro. El primero es con taxímetro y en el segundo se negocia el precio antes de subir. Muchos intentarán hacer paradas en el camino para que compres algo, a prestar atención.

Pero por más que vayan directo a las pirámides, el viaje puede resultar más lento que en transporte público a causa del tránsito fenomenal que existe en las calles céntricas de El Cairo.

 

Viajar de El Cairo a las pirámides en metro

La distancia de El Cairo a las pirámides es de 18,7 kilómetros. Una de las cosas más extrañas es que se puede acceder a las pirámides en metro. Desde el Downtown de El Cairo debes hacer conexión con la línea 2, en dirección Giza.

Ni bien salgas del subterráneo, mucho cuidado con los taxistas. Su intención, más que llevarte hasta las pirámides, es venderte el paseo o hacerte visitar antes una tienda de artesanías o papiros.

La otra opción es combinar dos buses (pregunta cómo llegar a las pirámides (haram en árabe) y cualquier persona sabrá indicarte). Bajarás en una avenida de la aldea Nazlet as-Samaan, donde divisarás las pirámides a la distancia, para nada lejos, y te servirán de referencia para llegar.

 

Ir de El Cairo a las pirámides en bus

Para ir desde el centro de El Cairo en bus a las pirámides, debes coger el 355 o 357. El viaje demora 45 minutos.

Otra vez cuidado con la gente que te aborda e intenta “ayudarte”. Muchos solo quieren que contrates el viaje en camello y recibir una comisión a cambio, por lo que te dicen que la carretera está cerrada más adelante, o que mejor bajar en la aldea, cuando tú ves que más adelante está la pirámide y el bus avanza en esa dirección…

La entrada se compra en la boletería oficial.

 

Historia de las pirámides de Egipto

En la provincia de El Giza, los faraones de la IV dinastía (2630 a.C. – 2500 a.C.) se hicieron construir sus lugares de enterramiento para su segunda vida.

El pionero en la construcción de una pirámide como lugar de sepultura fue el faraón Snefru, quien levantó, no se sabe por qué, tres pirámides: la que se le atribuye en Meidum y las posteriores de Dahshur.

Su sucesor fue su hijo Keops, que levantó la Gran Pirámide (la más septentrional de las tres).

Según Heródoto (viajero e historiador griego que visitó Egipto en el siglo V a.C.), Keops fue un faraón violento que mandó a cerrar los templos de los dioses y dijo que el pueblo debía invertir todo su tiempo a las órdenes del faraón.

Su nombre original era Khufu; los griegos lo transformaron a Keops.

Le siguió con las mismas intenciones su hijo Kefren (o Khafra, en árabe), que quiso construir una pirámide un poco mayor que la de su padre (más al sur), pero no le fue posible por muy pocos metros.

También a Kefren se le atribuye la edificación de la Esfinge, monumento con forma de león y cabeza humana.

Del matrimonio de Kefren y Khamerernebty I nació Menkaure, más conocido como Micerinos, constructor de la tercera pirámide, la más pequeña de la meseta de Giza.

La primera pirámide, la más grande de las tres, es la que se divisa nada más subir la explanada.